El otro día vi un artículo en Facebook que me llamó la atención. ¿El título? 19 cosas que sólo las mujeres de cuidados mínimos (en cuestiones de moda) entienden.
Parece que para las mujeres sólo hayan dos opciones. Están las que se cuidan un montón, siempre pendientes de su apariencia, que necesitan al menos 3 horas para arreglarse, su mejor amigo es el espejito mágico al que le hablan y llaman por nombre de pila como la madrastra de Blancanieves. Tienen que probarse varios conjuntos de ropa, crearse peinados especiales, maquillarse con varias capas, vamos casi a lo Kim Kardashian. En el otro espectro está la mujer de bajo mantenimiento, la que se pone lo primero que encuentra en el armario, casi no sabe lo que es un peine, tiene tanto que hacer que pasa de estos temas. Sin embargo como asesora de imagen no creo que haya que irse al extremo para tener estilo, hay mucha vida entre los grises, cada una de nosotras puede redefinir lo que significa cuidarse. No se trata de ocuparse de nuestra imagen por los demás, sino por nosotras mismas. Del mismo modo que nuestro entorno (casa, coche etc) nos encanta cuando está ordenado, con cosas bonitas, ¿por qué no llevar prendas que nos hacen sentir bien y resaltar lo mejor de nosotras? ¿por qué no expresar nuestra personalidad y creatividad con nuestra apariencia?
Comentaré varias ideas del artículo y añadiré mis propuestas como estilista personal, mis trucos o tips que puedes aplicar ya para darle un nuevo aire a tu imagen personal de forma sencilla y en línea con tu personalidad. Cuidarse puede ser divertido y no te va a suponer muchísimas horas extra, son solo algunos minutos de más pero el resultado vale la pena.
– La mujer de cuidados mínimos sólo conoce 3 peinados: suelto, coleta y moño. Arreglarte el pelo no es lo tuyo, te pones el flequillo de un lado y máximo te pones una horquilla o diadema.
Mi idea:
No hace falta que aprendas mil peinados,si dominas esos tres pero te los haces bien, te puedes ver fenomenal. Eso sí el punto de partida será tener un corte de pelo profesional fácil de mantener y tendrás que ir con regularidad para tenerlo a raya. Eso de ir a la pelu una vez al año no es opción si quieres ser una mujer estilosa.
– Sólo tienes un par de zapatos que funciona con 95% de tu guardarropa.
Mi idea:
No existe el zapato que combina con toda la ropa salvo que utilices sólo pantalones de yoga, vaqueros, chándal y similares y los combines con zapatillas deportivas. Al menos necesitarás 3 tipos de zapatos distintos.
– La mayoría de tus looks consisten en vaqueros con camiseta. Un look para salir con amigas: le añades una chaqueta y punto.
Mi idea:
Si vistes igual que una alumna de instituto, mal vamos. Ese look puede ser una opción si le añades los accesorios adecuados (un pañuelo, un collar, varias pulseras, etc), lo combinas con una chaqueta de vestir, de punto o un chaleco, por ejemplo. Una camiseta no es siempre la mejor opción porque le dará a tu look un aire más informal, lo puedes modificar, ¿cómo? usando de vez en cuando otro tipo de tops como blusas y camisas.
-Los vestidos playeros te encantan porque parece que te has arreglado más cuando no es así.
Mi idea:
Genial, aprovecha los vestidos pero no sólo son para el verano. Todo el año puedes llevar diferentes tipos de vestidos, de punto, camiseros, rectos, en forma de A. Te salvan de cualquier apuro igual que los monos. Eso sí, añádele accesorios que le hagan subir de nivel al conjunto.
– El maquillaje te da algo de miedo. Entiendes los básicos y puede que te pongas alguna cosa antes de salir de casa, pero viste un día un video de Youtube sobre contouring (esculpido del rostro) y casi te da algo.
Mi idea:
Te voy a ser sincera, también soy una mujer de bajo mantenimiento, minimalista y no es que sienta una gran atracción natural hacia el maquillaje pero soy consciente de que algunos productos puestos de forma estratégica pueden hacer maravillas. Por eso soy tan fan de los productos multiuso como las cc Cream o hidratantes con color, utilizar lo mínimo para disimular ojeras, darle algo de tono a las mejillas, máscara de pestañas y unos colores discretos para los párpados. Menos de dos minutos que hacen una gran diferencia.
No empieces por lo más complicado en el maquillaje, busca videos que sean sobre básicos de maquillaje paso a paso y míralos varias veces. Otra opción es ir a un stand de maquillaje de un centro comercial y recibir una clase (o varias)
– Cuando un evento requiere que lleves zapatos de tacón, para ti pierde muchos puntos. Cuando te pones los tacones ven que realmente hacen que tus piernas parecen más largas pero a mitad del evento te duelen tanto los pies que tienes ganas de cortarlos con una navaja suiza. Total, que te encantaría ir con zapatillas y traje como hacen algunos hombres estilosos.
Mi idea:
No te compres cualquier zapato de tacón, en lugar de ir a los stilettos o zapatos de 10 cm o 7,5 cm, opta por algunos de tacón bajo, inferior a 5 cm y asegúrate de que sean cómodos. Practica por el pasillo de tu casa, llévalos varios días para que tus pies se acostumbren a ellos. Si no eres de llevar tacones no te los pongas sólo una vez al año, al menos una vez al mes o mejor una vez a la semana ponte tus tacones bajitos. Una vez superado el miedo a las alturas les cogerás incluso cariño a tus tacones.
Por supuesto, puedes ir chic también con zapatos sin tacón, busca unos slippers sofisticados o unas sandalias metalizadas por ejemplo.
Por cierto, también puedes llevar traje con zapatillas deportivas y verte genial.
¿Te identificas como una mujer de cuidados mínimos? ¿Qué consejos vas a poner en práctica? ¿Qué atajos has encontrado para verte bien sin invertir mucho tiempo?
Carie Mercier Lafond es asesora de imagen y estilista personal especializada en la imagen del hombre y la mujer profesional. ¿Cómo te podemos ayudar? Queremos que cada día te veas y sientas bien y descubras tu propio estilo. Te ayudamos a encontrar ropa favorecedora (sin que importe tu talla, edad) y aprenderás cómo ir bien vestido/a siguiendo pasos sencillos, sin que cueste mucho tiempo ni dinero.
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(Secretos de Karl) de la editorial Marabulles. En el libro como bien indica su título encontramos datos pocos conocidos del diseñador alemán como que le gusta diseñar en pijama o dibujar con maquillaje.
